Matamoros, Tamaulipas.- La mala administración que en su momento tuvo en sus negocios particulares, el alcalde Jesús de la Garza los ha llevado a la función pública, de tal forma que en la presente catorcena no se pagará a dos mil 700 trabajadores del municipio y que representa una erogación de 12 millones de pesos.

Empleados del Ayuntamiento, quienes pidieron su anonimato por temor a ser despedidos, manifestaron que a cada uno de ellos, sus jefes inmediatos les comunicaron de manera verbal que no iban a percibir su salario sino hasta la semana entrante, debido a que había fallas en el sistema.

Esta situación provocó reacciones entre los integrantes del Cabildo, por ejemplo el regidor Jorge Rentería Campos se pronunció en contra de que no les hayan pagado a algunos empleados del municipio.

Dijo que es una injusticia que no se les haya pagado a los trabajadores y confirmó que a ellos sí les hicieron su depósito correspondiente, incluso mencionó que lo que a él le pagan lo va a destinar a donárselos a algunos de los empleados que no les hayan pagado, "lo que se alcance”.

Por su parte el regidor panista Antonio Amaro Chacón, consideró que tal vez no sea una crisis la del Ayuntamiento de Matamoros, pero sí que hay una mala distribución de los recursos.

Asimismo dijo que habrá de exigir una explicación de lo que está pasando con esta disciplina financiera, a raíz de que hay quejas de trabajadores que no están recibiendo sus pagos.

Mientras que la primer sindica Laura de la Garza Páez, defendió al alcalde de Matamoros asegurando que era un problema del sistema de pagos.

“Fue por problemas en el sistema que por cierto se encuentra en el Estado de Querétaro, se trata de una empresa externa que fue contratada para ello”, manifestó al indicar que desconoce su nombre.

Comentó que con los trabajadores sindicalizados no hubo ese problema, porque a ellos ya se les había hecho la transferencia correspondiente.

Cabe destacar que el presidente Jesús de la Garza, indicó que para el lunes de la próxima semana quedaría resuelto el problema, pero por mientras los dos mil 700 trabajadores tendrán un fin de semana negro.